Salve

 

Dios te Salve, Virgen pura,
Reina del Cielo y la tierra.
Luna clara del Rocío,
luciente y hermosa estrella.
Dios te salve, Blanca Paloma,
Madre de los rocieros,
a Ti llamamos nosotros
desterrados hijos de Eva.
Ea, Madre del Rocío,
constante abogada nuestra,
vuelve a nosotros Tus ojos
inundados de nobleza.
Ea, Madre del Rocío,
consuelo siempre en la pena,
muestra a nosotros Tus manos
de misericordia llenas.
Y después de este destierro
a Tu bello Niño muéstranos.
A ese Sol, bendito fruto,
Pastorcillo de esta tierra,
a Tu bello Niño muéstranos.
A ese salvador del mundo,
que nos guía y nos sustenta,
y nos lleva hasta Tu trono
en la fiesta rociera.
Oh, dulce Virgen María,
sé Pastora en esta tierra.
Guía bien a Tu rebaño
a las marismas eternas.
Oh, Madre de Dios, salva al rociero
que siga la senda del Rocío al Cielo.

 

Oración de La Hermandad

 

“Madre Nuestra del Rocío,

Blanca Paloma del Amor y de la Paz,

Reina y Señora de las Marismas,

recibe en tus manos purísimas

esta plegaria que te ofrecemos

y deposítala en el corazón de tu Hijo,

Díos y Señor Nuestro,

para que Él nos ilumine y nos ayude

en nuestro quehacer diario,

y por intercesión tuya,

nos dé el amor necesario

para ser comprensivos y caritativos

con nuestros hermanos,

cumpliendo de esta forma

ese mandamiento tan hermoso que dice:

*Ama al prójimo como a ti mismo+”

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies